sábado, 2 de noviembre de 2013

Mi opinión del primer libro de Percy Jackson.



Yo ya se que conocen todos los libros de Percy, pero les voy a dar mi opinión del primer libro:

Percy Jackson y los Dioses del Olimpo. El ladrón del Rayo.


   El libro está muy bueno. Cuando lo empiezas a leer no tienes ni idea de qué es un semidiós, o un dios, o un sátiro; pero a medida que avanzas, descubres las respuestas a esas preguntas, además que te diviertes y te "metes" y participas de la historia.
   Percy pasa a ser tu ídolo, Annabeth una gran amiga, Grover un compañero miedoso pero imprescindible, Clarisse una enemiga más. Todos forman parte de "tu" cuento. Además, comienzas a pensar que tú puedes ser un semidiós, y te preguntas quién puede ser tu papá (o mamá) divino. 
   La historia en sí está bien pensada. El autor es un genio. A mí, en particular, me atrae porque relaciona cosas antiguas, como son los mitos y demás cosas griegas, con la realidad. Eso de que la entrada al Inframundo esté en Hollywood, o que el Olimpo esté sobre el Empire Earth, son ideas buenísimas. Además, otra cosa por la que me gusta leerlo, es que Percy tiene la misma edad del público al que está dirigida la saga. 
   En la historia, se mezclan partes de misterio, aventura y amistad, así como peligro. Todas esas cosas combinadas hacen que quieras terminar de leerlo enseguida, para saber qué pasa con tal cosa o con tal otra; pero, cuando lo terminas, te arrepientes de haberlo leído tan rápido. Sientes como si no lo disfrutaste bien.
   Todos los personajes son únicos, y siempre hay uno que es tu preferido. Pueden ser tanto Percy o Annabeth como Clarisse o Luke, todo depende de cada uno. A mi, por ejemplo, me agrada Annabeth, pero también Luke, porque él no tiene la culpa de ser malo, es que Cronos lo controla.
   
    Esta es una pequeña sinopsis del libro:
   Percy Jackson vive una vida tranquila y apacible en Nueva York, estudiando en un internado para niños problemáticos. Percy no sabe todo lo que le rodea hasta que en una visita a un museo es atacado por una Furia, quien estaba disfrazada de su profesora de matemáticas, la Srta. Dodds. Percy es salvado por su profesor, el señor Brunner. Después de esto, todo el colegio trata de olvidar a dicha profesora y nadie la menciona de nuevo, pero Percy puede ver que existió, que no se la imaginó. 
   Cuando el curso acaba y debe volver a casa con su apestoso padrastro y su madre, Grover su mejor amigo, le pide que le deje acompañarle. Percy le abandona en una estación y sale con su madre de viaje, el cual es interrumpido por un monstruo. Junto con Grover y su madre, Sally Jackson, Percy abandona la playa a la que fueron, y se dirige al campamento Mestizo. 
   La madre de Percy "muere" durante el trayecto a manos del Minotauro. Una vez en el campamento Percy descubre que es hijo de Poseidón, dios de los mares. Numerosos monstruos deciden perseguirle y atacarle ya que según una antigua profecía un hijo de Poseidón, Hades o Zeus tomará la decisión de destruir o salvar el Olimpo, por esto el papel de Percy es tan importante.
   En el Campamento Mestizo, Percy conoce a Annabeth, hija de Atenea, diosa de la sabiduría. 
   Luego, Grover, Percy y Annabeth son enviados a una misión a contrarreloj en la que tienen que recuperar el Rayo Maestro de Zeus antes de que llegue el solsticio de verano, ya que Zeus piensa que lo robó Poseidón ayudado por Percy, y él tiene que limpiar su honor.

Algunos de los personajes del primer libro:
Percy, hijo de Poseidón, dios del mar.
Annabeth, hija de Atenea, diosa de la sabiduría.
Grover, un sátiro, mitad hombre mitad cabra.
Luke, hijo de Hermes, mensajero de los dioses.
Clarisse, hija de Ares, dios de la guerra.
Quirón, un centauro, mitad hombre, mitad caballo.
Connor y Travis, hijos de Hermes.
Sally Jackson, madre de Percy.

Si quieres, puedes comentar tu breve opinión del libro Percy Jackson el ladrón del Rayo...
Saludos!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Todo comentario que contenga información o cualquier cosa que sea contraproducente para el Blog será eliminado. Cuando comentes, tenelo en cuenta.